Para inaugurar este Blog consideramos importante lanzar una serie de artículos que pongan de manifiesto la importancia de las finanzas alternativas, las dificultades para impulsarla, los mecanismos y las características de las diferentes alternativas. 

Es importante señalar que la financiación alternativa trata de paliar la financiación tradicional de las empresas en España. Durante mucho tiempo, en nuestro país, las empresas han tenido como canal, prácticamente exclusivo de financiación no comercial el bancario, y la financiación de las compañías se originaba con fuertes desequilibrios (patrimoniales o de plazos).

1. España es uno de los países de la OCDE con mayor peso de la financiación bancaria, incluso de las grandes compañías, y con menor desarrollo del mercado de bonos corporativos.
2. El sistema bancario español va a continuar en su particular proceso de reducción de balance, lo que unido a las mayores exigencias de Capital en los préstamos bancarios por parte de “Basilea 3” seguirá suponiendo una limitación a la financiación bancaria. Lo ideal sería una reducción drástica de los préstamos concedidos a proyectos y empresas inviables, como el crédito inmobiliario, que permitiera otorgar nuevo crédito a empresas con perspectivas de crecimiento. Hay que liberar capital actualmente dedicado al sector inmobiliario.
3. Restricciones a los flujos transfronterizos en la zona euro como consecuencia de la fragmentación y segmentación por países.
4. El efecto Crowding Out o efecto expulsión. Las enormes necesidades de financiación del Estado español absorben buena parte de la capacidad de crédito del sistema bancario. Difícilmente una entidad va a prestar a una empresa si puede prestar al Estado a 10 años al 4% (rentabilidad actual del Bono soberano español a 10 años), y hacerlo a tipos competitivos es tarea aún más difícil. Hay que reducir la deuda y déficit del Estado para que el crédito vuelva a la empresa y lo haga a tipos competitivos.