Este anteproyecto nace con dos objetivos: trasladar al directiva europea de gestores de fondos de inversión alternativa y mejorar el sector del capital riesgo como fuente de financiación alternativa a la bancaria para las pymes en sus primeras fase de desarrollo. La principal novedad será la creación de la figura de la entidad de capital riesgo pyme, que serán aquellas gestoras de capital riesgo que dediquen al menos el 70 % de su inversión en pymes, a las que también deberán aportar asesoramiento y gestión.